martes, 31 de octubre de 2017

¿POR QUÉ ESE ODIO A PODEMOS?.


¿POR  QUÉ  ESE  ODIO  A  PODEMOS?.

Circula por ahí un video en que se ve a Pablo Iglesias, en una estación de trenes de Barcelona, siendo abucheado por españoles que iban a una manifestación anti-independentista en Cataluña.

Teniendo en cuenta que el Señor Iglesias defiende que allí se realice un referendum pactado, en el cual él (y Podemos) defenderían que Cataluña siguiera formando parte de España,  no se entiende por qué le achucharon con gritos de “Fuera, fuera”.

Por las mismas fechas circulaba una volatina o papeleta por las redes socilaes, de un fantasioso referendum en el que se pediría la ilegalización de Podemos por ser “malos” (pónganse aquí lo adjetivos que se quiera).

Todo esto avivó en mi una cuestión que me tiene intrigado.

Resulta que siendo yo de Izquierda Unida, y por defecto comunista (y al revés), en multitud de ocasiones he recibido los siguientes consejos de conocidos míos muy variados (ideológicamente) que mostraban buena fe.

Y que se traducirían en esto:

1.- Los de Izquierda Unida sois buena gente, habéis generado un prestigio propio, sois dignos de admiración y cometeríais (o habéis cometido) un error juntándoos con Podemos que son mala gente y la escoria de la sociedad.

2.- Su líder (Pablo Iglesias) es, en seres humanos, lo peor que hay (Bueno, lo dejo ahí, y no me explayo por si su padre, mi buen amigo Javier Iglesias, lee esto).

Así las cosas me pregunto (y les pregunto a ustedes, que son el pueblo) .

¿Son realmente malas personas los de Podemos? (Los que conozco en Zamora parecen normales e incluso buenas).

Si son malos ¿lo serían porque todos son una copia de su líder, que sería el malo por antonomasia, o es que Dios los crió malos y ellos se juntaron de repente?

Políticamente: ¿Son odiados por temidos  o temidos por odiados?

¿Por qué los míos y yo, somos buenos, y ellos malos o tan malos?

¿Por qué a nosotros nos aprecian y a ellos los desprecian?

¿Hay algún hecho objetivo por el cual se les tenga tanta manía, o se trata de un odio inducido desde las tertulias del poder donde se presentan facturas falsas o videos recortados para que  parezca que dicen lo que no dicen?.

Y sigo preguntándome.

¿No será que nosotros (los que Franco persiguió con saña) ya no asustamos al Poder porque supone que somos pocos o muchos con poca determinación?

¿No será que ellos amenazan por número y nosotros por convicción, y por eso sea necesario separarnos (divide y vencerás) diciéndonos que no vayamos con malas compañías por nuestro bien?

¿Quiere el Poder aislarnos para primero acabar con ellos (amenaza inminente) y después con nosotros (amenaza pendiente)?

¿Ha señalado el Poder a la gente con sus medios de perversión de masas, cuál es el enemigo principal, y a batir en primer lugar, para después ir a por el siguiente enemigo de clase, etc.?

(Según Mao, comunista chino, si tienes más de un enemigo no hay que atacar a todos a la vez porque perderías, sino que debes seleccionar al principal según el momento político, e ir contra él primero, para luego, si vences, pasar a actuar contra el segundo, etc.).

En definitiva ¿Por qué para ser un ciudadano solvente, hay que odiar a esta gente?

Díganme, por qué, porque al final va a tener razón Confucio Molina cuando percibe que para el Poder, en estos momentos,  los comunistas son especie protegida y los de Podemos especie a exterminar.

Y es una ofensa que nos ninguneen, digo yo, desahogándome.


Paco Molina. Zamora 30 de Octubre del 2017

lunes, 23 de octubre de 2017

EL MONARCA AMORDAZADO


EL  MONARCA  AMORDAZADO

La Constitución Española de 1978 dice que el Pueblo es Soberano.

Esa expresión (el pueblo español es soberano) se está repitiendo hasta la saciedad con motivo de la polémica suscitada por los Independentistas Catalanes.

(No confundir con los soberanistas, que se limitan a pedir el derecho a un referéndum que dilucide de una vez por todas quienes son más numerosos en Cataluña, si los que quieren separarse o los que no quieren separarse de España).

La expresión “el pueblo es soberano” quiere decir (y recordarnos) que hay que hacer lo que dice el pueblo, puesto que se le asimila al Rey (al Soberano) cuando éste lo era por la Gracia de Dios.

La soberanía del pueblo (se ejercería o se sabría así):

1.-Éste elige a sus representantes favoritos (partidos).

2.-Estos hacen las leyes (Poder Legislativo).

3.-Los jueces (etc.) sentencian las conductas de los ciudadanos (Poder Judicial).

4.- Y el Gobierno (salido de las Cortes que han salido de las urnas) ejecutará lo decidido por ellas en bien del pueblo (Poder Ejecutivo).

Como se ve esta cadena de pasos democráticos está condicionada por el primero y fundamental: Hay que saber lo que quiere el Soberano (el pueblo).

Pues bien el motivo de que les moleste es para hacerles ver que la voluntad (lo que quieren) los españoles no se sabe que cosa es, porque estos están amordazados (bueno, he exagerado, pero lo cierto es que se distorsiona su voz de manera que no se sabe lo que quieren) de manera tal que se ha convertido al pueblo español en un soberano tartamudo.

Y el problema es grave porque si no se sabe lo que quiere el soberano, poco pinta el soberano.

Hace días el Rey vigente, Don Felipe VI, ha opinado sobre el tema de Cataluña y tras oírle quedó bien claro que quiere seguir siendo Rey de esa pedazo de España.

Es decir, habló, habló alto, habló claro y todos le entendimos.

Pero imagínense qué hubiera salido ante las cámaras amordazado, o hablando como un tartamudo severo. ¿Qué habría pasado? Pues que no sabríamos lo que quiere el Soberano.

Pues en verdad, en verdad, les digo que eso ocurre con el Pueblo Español por culpa de la Ley electoral.

Normalmente para saber lo que quiere un colectivo se le pregunta a éste, y luego sus opiniones se consideran según el número de votos (en la escuela a esto lo llaman repartos directamente proporcionales).

Perfecto y fácil. Pero sin embargo en España se hizo una ley electoral que impide saber lo que quiere el soberano (el Pueblo)

Para ello se introdujeron dos factores perversos (por no hablar del reparto injusto en los medios de comunicación).

Veamos, dado que en España los electores son 35 millones de personas, y los Diputados que se eligen 350, es evidente correspondería un diputado para cada 100.000 electores.

Pues bien, no es así, porque se decidió (por los poderosos) que la jurisdicción electoral fuera la provincia (cuando podría ser toda España, o por comunidades). Y a continuación se hizo que a las provincias históricamente más conservadoras según las estadísticas (más rurales) se les adjudicaran más diputados de los que les correspondería por el número de habitantes.

Ejemplo, Zamora (y similares) por el número de votantes sólo tendría derecho a un Diputado, y sin embargo le corresponden 3.

Es decir ya sólo con Zamora se le ha quitado a 200.000 españoles que viven en otras provincias más pobladas, dos Diputados.

Así que teniendo en cuenta las de “zamoras” que hay en España, véase a cuantos españoles se les ha quitado el derecho a elegir “su” diputado.

Y encima a este despropósito se une la Ley D´Hont, que no la explicamos pero que se resume en que quien más votos saca se lleva una propina en Diputados, por lo que obtiene más de los que le tocan por repartos proporcionales puros.

Todo esto origina distorsiones muy graves como estas:

Legislatura 2011-2015, el Pueblo Soberano Español dice en las urnas, con el 43 % de los votos válidos que sacó el PP, que no quiere que el PP tenga mayoría absoluta.

Pero sin embargo, gracias a la estafa de la Ley Electoral vigente, el PP obtuvo más del 50 % de Diputados en las Cortes Españolas (mayoría absoluta), con lo que pudo pasar la guadaña de los recortes por el pescuezo del pueblo soberano (y burlado), a pesar de que éste (tan soberanito él) no le había dado la mayoría absoluta.

Año 2015. En Cataluña hay elecciones plebiscitarias, en las que por lo bajo lo que se ventilaba era si se quería la independencia .

Se presentan dos formaciones independentistas. La CUP (izquierda nacionalista catalana) y Juntos Per SÍ (coalición que como su nombre indica están por el SÍ a la independencia).

Entre ambas obtienen el 47 % de los votos válidos (es decir, menos del 50 %) pero por la Ley Electoral española, en el Parlament pasan a tener más de la mitad de los diputados (mayoría absoluta).

Y por esto es por lo que dicen que Cataluña votó por mayoría absoluta dar los pasos que fueran hacia la independencia, lo mismo que en el 2011 Rajoy dijo que el pueblo soberano votó que se le recortara sanidad, educación, justicia, dependencia, pensiones, etc.

Resumiendo: Si el pueblo es soberano, pero con la ley Electoral se desvirtúa lo que quiere, lo que  soberana es la tomadura de pelo a la democracia y al pueblo soberano.


Paco Molina. Zamora. 24 de Octubre del 2017

viernes, 20 de octubre de 2017

UTILIDAD DE LA ADULACIÓN DE LOS CUERPOS ARMADOS.


UTILIDAD DE LA ADULACIÓN DE LOS CUERPOS ARMADOS.

Los cuerpos armados (policía y ejército) de cualquier país tienen a su cargo una delicada misión (por los riesgos que corren) consistente en mantener el orden establecido.

Establecido conforme a unas leyes que tienen, en el caso de las policías que ver con la delincuencia.

La extracción social de los miembros de los cuerpos armados (en España, policías nacionales, municipales, autonómicos y guardia civil, amén del ejército, es eminentemente obrera.

Es decir, son trabajadores cuya necesidad de un puesto de trabajo para vivir o por vocación, les hizo optar (con éxito) por ser “obreros armados”.

El hecho de que vayan armados hace que ya de por si se les haga un poco la pelota. Pero no es de esta indirecta faceta, por lo demás poco trascendente, de la que queremos hablar aquí.

Lo importante es lo siguiente.

El que en efecto sean “obreros armados” no significa, ni mucho menos, que estemos hablando de una revolución en la que la clase obrera ha triunfado y el nuevo orden establecido deba ser defendido por la fuerza de ciudadanos con armas.

Más bien, todo lo contrario, en los países capitalistas, aunque los cuerpos armados están compuestos por trabajadores, el Poder (conjunto o clase social de los ricos) los utiliza a veces para mantenerse él (el Poder) en el poder.

Es decir, aunque la tarea de un policía o guardia civil, es perseguir al delincuente (aislado u organizado en bandas) en ocasiones el Poder los utiliza o emplea para reprimir (meter el miedo en el cuerpo) a ciudadanos que no son delincuentes al uso.

Por cierto, al hablar del Poder, no hablamos de los Gobiernos electos, si no de los capitalistas o ricos, que son los que quieren que nada cambie (son lógicamente conservadores, “Virgencita, virgencita, que me quede como estoy, con el yate y con Rajoy”) y que nada avance hacia nuevos escenarios y menos hacia el reparto de la riqueza.

En estos casos, cuando el Poder ordena (a través de sus capataces políticos) que los cuerpos armados “hagan entrar en razón a grandes manifestaciones de ciudadanos” siempre le recorre (al Poder) un miedo que le hiela la columna vertebral.

Miedo a que los ciudadanos armados se unan a los ciudadanos desarmados y la armen contra los abusos del Poder.

Surge por ello la necesidad y el momento de “hacerle la pelota” a policías y guardias civiles (y en ciertas guerras absurdas por no ser de defensa, a los ejércitos).

Estos días precisamente (Octubre) se cumplen 100 años de la revolución rusa que triunfó porque policía y ejército no acataron las ordenes de cargar contra el pueblo, hartos como estaban de morir en una guerra (la 1ª mundial) de esas entre ricos (naciones) pero en la que sólo mueren los pobres.

Pero bajemos a la actualidad. Al 1 de Octubre del 2017 pero en Cataluña (España).

El Gobierno de turno (PP) configurando un trípode (estructura estable por naturaleza) con PSOE y Ciudadanos, decidió enviar “trabajadores armados” para evitar que “trabajadores desarmados” (ciudadanos) fueran a votar a un referéndum prohibido (sobre si querían ser independientes o no).

Naturalmente la situación era delicada ya que se pudo producir un cortocircuito de simpatía (obrero armado con obrero desarmado) y (re)volverse todos a una contra el Poder (que sin las fuerzas armadas, a las que paga con nuestro dinero, no tendría poder).

Y conscientes los poderosos de que más envites de ese tipo (el roce hace el cariño) pudieran acabar generando cortocircuitos de afecto entre unos y otros trabajadores, dio orden (a través de sus medios de comunión de masas) de adular a los cuerpos armados (Que en todos los cuarteles de la Guardia Civil, cuya patrona por cierto es una Virgen, todos los discursos fueran de apoyo a los que estuvieron y están en Cataluña, lo confirma).

Usar a la fuerzas del orden contra la población propia (no contra bandas de delincuentes) o ajena (guerras) es un acto contra-natura (enfrenta a obreros contra obreros), o si se quiere es enfrentar a ciudadanos normales contra ciudadanos normales.

Y la prueba de que  eso es un despropósito lo muestra la historia (nuestra y ajena).

Adular a las fuerzas del orden para que “ocupen” Cataluña (porque les interesa a los poderosos de España, que si no ordenarían a Rajoy negociar) amen de  amargar la existencia de los que allí viven habitualmente cumpliendo su deber de perseguir la delincuencia (policía nacional y guardia civil), es un despropósito que encima perjudica a los adulados (a quienes se les pide algo tan irracional como que consideren a miles y miles de personas delincuentes).

En resumen: Respeto y honor a las Fuerzas y Cuerpos Armados, pero recuérdese que adularlos para que asuman con entusiasmo tareas moralmente duras (contener al pueblo) va contra el sentido común, y parece pretender inducirles a que se crean extraterrestes sin sentimientos, olvidando que son trabajadores armados cuya misión es defender a los trabajadores desarmados.

PD: Por el mismo razonamiento pero expuesto al revés, deben entender ciertos “revolucionarios” que considerar a los cuerpos armados el enemigo de clase, es un error monumental que celebran con cava los poderosos.

Paco Molina. Zamora. 20 de Octubre del 2017                  



martes, 17 de octubre de 2017

CATALUÑA: A DIA DE HOY (17.O) NO HA DECLARADO LA INDEPENDENCIA.


CATALUÑA: A DIA DE HOY (17.O) NO HA DECLARADO LA INDEPENDENCIA.

Anda la mayoría muy excitada, y más el Gobierno de España que es quien la excita, con el presunto hecho de que una minoría de locos independentistas (desagradecidos a España a la que tanto deben) han declarado la Independencia de Cataluña.

Y como según esa teoría (que los independentistas por boca de Puigdemont han declarado la independencia) hay que hacer algo para evitar que se consume, proponen aplicar el artículo 155 (que supone una “ocupación de hecho” de una región española, quitándoles autonomía, cuando otras 16 cuentan con ella).

Soy de los que considera, y aconsejo, resolver este grave problema mediante un dialogo que desemboque en un Referendum Pactado entre ambas partes para resolver el embrollo; lo cual supone que hablen entre sí los que tengan que hacerlo.

Por tanto trato con este escrito hacer ver que Cataluña (su mayoría parlamentaria) no ha declarado la independencia, lo que supone que no se han salido de la legalidad, y por tanto no hay impedimento para el diálogo en el sentido indicado.

Uso de nuevo una parábola.

Este era un ciudadano que tenía una enfermedad crónica. Como estaba angustiado por sus molestias, acudió a un afamado doctor; médico que era algo estrambótico pues también tenía dotes de curandero e incluso usaba cualquier remedio para poner remedio a los males.

Tras los pertinentes reconocimientos clínicos, y pasados unos días de estudio sobre el caso, el Doctor le entregó un tratamiento, que como cosa curiosa incluía el uso de alguna droga prohibida

El enfermo se vio un poco sorprendido por el tratamiento, y consultó con otros médicos y conocidos, antes de comentárselo a su mujer e hijos.

Llegado el momento de informar sobre su decisión, reunió a los suyos, en especial a su esposa que no veía claro aquel tratamiento.

Y ante sus hijos y compañera afirmó solemnemente: “Estoy convencido que el tratamiento que se me ha recetado reúne las condiciones mínimas de fiabilidad. No obstante no lo voy a seguir, tras ver lo que pueden suponer contra mi vida los efectos secundarios. Por tanto dejo en suspenso el tratamiento, aunque eso si con la puerta abierta a que si me siento muy mal, lo siga””.

Todos respiraron pues aunque en el papel del médico (en la receta) se hablaba incluso de drogas prohibidas, era evidente que aquel padre de familia, al suspender la aplicación del tratamiento (aunque lo considerara válido) seguía dentro de la ley evitando los daños secundarios de las drogas prohibidas (la cárcel).

Pues en verdad, en verdad, os digo que Puigdemont ( o sea, Don Juntos Per Sí y de la CUP) es el enfermo histórico (crónico); que ha buscado recursos en todos los ámbitos para resolver su dolor (él lo tiene). Que encontró un tratamiento o salida contra sus males (el referendum del 1.O).

Pero que a la hora de la vedad, decidió no aplicar tal tratamiento o medicina, por miedo a sus efectos secundarios, y por eso dijo que el tratamiento (el camino) era correcto; pero que lo suspendía  o no aplicaba en espera de otras fórmulas o medicinas.

Por tanto es obvio que en Cataluña actualmente no hay la menor independencia, por lo que el Gobierno de allí está dentro de la Ley, de lo que se deduce que lo lógico es negociar.

Y no hay derecho a que el Gobierno del PP y sus monaguillos (Ciudadanos y PSOE) ante esta grave situación, no usen el célebre consejo de “a enemigo que huye puente de plata”, y prefieran humillar a un importante número de catalanes haciendo que sus representantes confiesen que los efectos secundarios de las medicinas son preocupantes.

El uso como vía política del: “A enemigo que huye, palo y exterminio” ni resolverá el problema, ni nos llevará a nada bueno.

Lo normal es hablar y pactar un referendum cuyo resultado deje calmado a todo el mundo (sea el que sea; aunque es más que seguro que ganará el NO a la independencia).


Paco Molina. Zamora. 17 de Octubre del 2017

sábado, 7 de octubre de 2017

CATALUÑA PARA LISTOS


CATALUÑA PARA LISTOS

Jesús el Galileo decidió usar parábolas para explicar las cosas al pueblo sencillo que estaba siendo engañado por los poderosos.

Esto que sigue va en el mismo sentido.

Ocurrió en un Hospital. De repente un sector  de los enfermos empezó a exigir pijamas negros. Como parecían pocos y locos, (a quien se le ocurre pedir pijamas de otro color que no fuera el tradicional) la Dirección del centro decidió tratarlos como si fueran internos de psiquiatría.

Pero el caso se complicó cuando el problema no sólo se mantuvo si no que el número de enfermos que pedían un pijama negro aumentó, y lo que fue peor, a ellos se unieron los que pedían el derecho de los enfermos a elegir el color del pijama del centro.

Ante esto la gestora del Hospital decidió aplicar las normas o leyes del Hospital, basadas en el estatuto del paciente, etc. La ley es la ley, dijeron.

También confiaron los directivos en que dando de alta a los enfermos más beligerantes, el problema, tonto por otra parte, desaparecería.

Aunque para sorpresa de todos, los nuevos internos o internados, venían con la misma exigencia. Unos reclamando el derecho a decidir sobre el color del pijama, y otros, los negreros,  exigiendo que estos fueran negros.

Nadie entendía el problema por absurdo pero el problema existía. Es decir era un problema político.

Se enviaron fuerzas de ocupación asignando a cada enfermo un piscólogo que le hiciera entrar en razón.

Más el conflicto se siguió agigantando, llegando los enfermos a renunciar a sus tratamientos e incluso los de las listas  de espera para ser operados, oponiéndose a las intervenciones que salvarían sus vidas. Siendo la imagen ante el exterior deplorable.

Algunos en el Hospital empezaron a decir que bueno, pero que si había un referéndum sobre el color del pijama, ellos (médicos, enfermeros, camilleros, administrativos, limpiezas, etc,) también tenían derecho a votar el color del pijama de los enfermos pues trabajaban en el mismo hospital y el color (negro) les afectaba, deprimiéndolos, pues el negro recordaba la muerte, cosa que allí se quería evitar.

El asunto se complicó cuando la dirección decidió enviar a psiquiatría a enfermos de colon ulceroso, simplemente porque defendían con más ahínco que otros el referéndum de determinación (del color del pijama).

Todo aquello era o parecía un problema absurdo, pero como existía tal problema, dejaba de ser absurdo para convertirse en un problema real y gordo, que había que resolver quieras que no.

Problema que se agravó  cuando la prensa internacional puso sus ojos en el tratamiento enfermizo del problema (sacando a los sanos del país con banderas a pedir que no se hiciera caso a los enfermos: 

“Encima que se curan con nuestro dinero quieren decidir el color del pijama, egoístas, malos enfermos, a por ellos. Gobierno no cedas. La Legión a los Hospitales".

Así las cosas, alguien apuntó al problema de que la histeria se contagiara a otros hospitales, y propuso ceder y celebrar un referendum, sólo entre los afectados (por el asunto del pijama) los enfermos.

Y aunque hubo quien se opuso. Se vio que el problema era tan político que no había otra medicina para curarlo que la política, que dice, “los problemas de los pueblos que los resuelvan los pueblos”.

Y se pactó un referéndum entre los enfermos, aceptado por estos y la dirección del hospital. Lógicamente en él solo votarían los afectados por el pijama, los enfermos.

Quedaron pues excluidos los que decían que el asunto tenía que ver con ellos porque el cambio de pijama era un gasto tonto que también lo pagarían ellos con sus impuestos. Por tanto los sanos y enfermos de otros hospitales quedaron marginados del proceso electoral.

Además que nunca se había dado el caso en la historia de la humanidad de que en un asunto así votara todo aquel que le diera la gana.

El referendum se celebró con todas las garantías y tres semanas de debates previos (en España suelen ser dos).

Naturalmente ganó el “no al cambio de pijama”, que para eso el sistema tiene la capacidad de mentir y presionar, y en cuanto se les dijo a los enfermos que el color negro atraía a los microbios (fuga de empresas) estos, casi por unanimidad votaron que todo siguiera como estaba que estaba muy bien.

Ah ¿Y si llega a ganar el cambio de color del pijama?. A parte de no ser tan grave, pues cosas de la democracia, pero, o se es o no  se es demócrata.

La libertad de cada persona consiste en que también como grupo tenga libertad.

Así que en verdad en verdad os digo, que el problema catalán solo tiene tres salidas:

O se envían tropas de ocupación permanente a Cataluña. Convirtiendo el problema en permanente

O Cataluña se independiza por las bravas y unilateralmente. Convirtiendo el problema en no resulto.

O los gobiernos de España y Cataluña (estos u otros) pactan un referéndum en que, algunos como yo y mi partido IU, y UNIDOS Podemos, les podamos decir que los pijamas negros no curan de la verdadera enfermedad, el capitalismo. 

Paco Molina. Zamora. 7 de Octubre del 2017.