UNIDAD
POR ZAMORA (¿).
Siendo ferviente
partidario de la unidad de los que buscan lo mismo, he de confesar que en
ciertos casos (casi teológicos) llego a extrañas conclusiones.
A ver sí aclarándome
lo aclaro.
Es bastante evidente
que si los que se dicen de izquierdas quieren que la Diputación sea recuperada
(o inaugurada) para el pueblo con el fin de aplicar desde ella criterios de
reparto de la riqueza de arriba a abajo (y no de abajo a arriba, como hasta
ahora), tendrán que unirse,
Sólo la conjunción
de Izquierda Unida, Podemos, Zamora Decide y Equo, (más sindicatos campesinos y
de clase apoyando en el programa y lo social), puede sumar, junto con los
Diputados Provinciales que obtenga el PSOE, ese número mágico, de 13, que todo lo modifique dándole la mayoría
absoluta al cambio necesario.
Pero esa es una
unión política (electoral) en que se agrupan los que teniendo el mismo programa
son débiles para afrontar la lucha con visos de victoria.
Y vamos ahora con lo
que para distinguirla de la expuesta podríamos llamar la Unidad Teológica.
Nos referimos a esa UNIDAD
que hemos empezado a oír que se reclama en Zamora (debido a su estado calamitoso
y comatoso)
UNIDAD reclamada, desde
hace poco, por este orden.
Primero fue
“Zamora10” (conjunto de empresarios que habiendo triunfado aún se preocupan por
su tierra).
Ellos han pedido dos
cosas: “No buscar culpables y UNIDAD para salvar Zamora”.
A continuación
surgió un movimiento más amplio y extenso, el conocido como Los Viriatos (o
mejor Las Viriatas) , que en su acto de Abrazar Zamora, vinieron a decir los
mismo: “Urge la UNIDAD de todos para salvar Zamora”.
Casi pisándole los
talones, el Presidente (o como mejor se
diga) de Caja Rural de Zamora, en la entrega de los Premios Anuales de la
Entidad, pronunció un discurso en que en resumen reclamó UNIDAD para salvar
Zamora.
Lo cual tiene más
importancia de la que parece porque según contó el Alcalde de la ciudad, Caja
Rural es poco menos que el Espíritu Santo del Ayuntamiento (O al menos su
Cirineo preferencial).
Incluso, en este
orden de cosas, podemos ver que el eslogan de la última campaña publicitaria de
la entidad financiera es “UNIÓN”.
Y en estas
estábamos, cuando casi sin solución de continuidad llegó el Día de la Provincia
(Botafumeiro éste de la Diputación Provincial de Zamora) y durante el festejo
la Señora Presidenta, no sólo pidió, sino que prácticamente exigió, “UNIDAD
para salvar Zamora”.
Pues bien, ante todo
esto, surgen una seria de dudas filosóficas por lo siguiente:
Abandonemos, nuestro
terruño y abrámonos al planeta. En el vemos:
Que todo el mundo
está de acuerdo (unido) en su deseo de que no haya guerras…pero las hay.
Que todo el mundo
está de acuerdo (unido) en su deseo de que no haya parados…pero los hay.
Que todo el mundo
está de acuerdo (unido) en su deseo de que no haya nadie que muera de hambre …pero
mueren.
Etc. Etc.
Esa paradoja, la de
que lo que quiere todo el mundo por unanimidad sea lo único que nunca se
resuelve, solo tiene una explicación… esa UNIDAD es falsa.
Alguien miente,
alguien traiciona, alguien quiere lo contrario de lo que dice.
Estrambote: En
definitiva, todos debemos de estar por esa UNIDAD que salve a Zamora.
Pero urge que los
que la reclaman nos cuenten en qué consiste:
¿Qué se pide? ¿A
quién se pide? ¿Qué se nos pide?.
Pues de lo contrario
desperdiciaríamos mucho tiempo sin buscar a los culpables para a continuación
ir cada uno por su lado.
Por cierto, que como
bien dice Confucio Molina: “Cuando las cosas van mal y nadie es el culpable, es
que el culpable es el sistema (capitalista)”.
Paco
Molina. Zamora. 9 de Octubre del 2018
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