HISTORIA DE UNA GOTERA (Sucedió en Zamora)
Nos notifican los noticieros que el Teatro “Ramos Carrión” sufre goteras.
No se alarmen, la goteras se han producido en lo que pompósamente, el ideólogo del mausoleo teatro, Señor Martinez –Maillo llamó Palacio de Congresos de Zamora (en realidad 3 aulas en donde iban a ir unas plazas de garaje).
Es decir las goteras no las tiene el Teatro propiamente dicho sino la parte de atrás (donde ahora se realizan espectáculos veraniegos).
Situados en el presente narremos ahora la historia de esta gotera.
Todo empezó en este siglo. Siendo el presidente de la Diputación don Fernando Martínez-Maillo, gracias a las mayorías absolutas del PP, y a su megalomanía (celebraba las tomas de posesión en un antiguo templo católico en vez de en el salón de plenos, como dice la normativa), le dio por reformar un teatro coquetón y burgués (con sus palcos, etc) en un híper teatro.
Tales aires de grandeza hicieron que una puesta al día del local, que iba a costar 9 millones de euros pasará a costar el doble (o sea 18). Las vicisitudes de todo, y otra falta de virtudes, las pueden encontrar en zamoraladiputaciónseguniu.blogspot.com (espacio especialmente recomendado para periodistas de últimas hornadas).
Al final de este dispendio el faraónico proyecto se quedó en el parto de los montes, pues salvo la fachada, que engaña, dentro hay un teatro de apenas 500 butacas de carácter funcional, y sin rastro del atractivo de aquellos que, como por ejemplo el teatro Principal en la misma Zamora, tienen su encanto y aire de teatro.
El despilfarro económico proviene de una cabeza loca (sirva de ejemplo que no iba a tener taquillas porque según “la cara del que sabe” todo se iba a hacer por internet, y al final las tiene) y de algún enchufe que otro en la adjudicación de las obras.
Como ven todo en la línea de esas obras del PP que en el programa televisivo “El Intermedio” llaman “el pormishuevismo” (Programa por cierto en el que tanto salió el Sr. Maillo cuando pasó a ser padre de la patria dejándonos abandonados a los zamoranos, sabiendo como sabe que sin él no somos nada).
Y hablando de teatros, de pormishuevismos y del PP, no nos queda otro remedio que mencionar otro teatro, el de la antigua Universidad Laboral.
Este, que tiene capacidad para 800 personas sentadas, está en estado de desguace, porque el bueno de Don Vicente Herrera (éste, también del PP, y presidente hace años de la comunidad más grande de Europa) en vez de arreglarlo con el dinero de la Junta puesto que pertenecía a la Consejería de Educación se le ocurrió lo siguiente (y ojo que todo esto enlaza con la goteras del Ramos Carrión).
Para ahorrarse el arreglo del teatro de la Universidad Laboral pide dinero a Europa (que entonces lo daba) para hacer un Centro de Congresos ¡¡¡¡¡¡¡subterráneo!!!!!!. (Bueno, en su descargo hay que decir que el teatro seguiría arriba, en la superficie).
Como las derechas gestionan muy bien, debieron decir, puesto que vamos a hacer un Centro de Congresos subterráneo lo lógico es que empecemos por hacer el agujero (y no se les ocurrió empezar por arreglar el teatro que sería salón del Centro de Congresos).
Consecuencia, hecho el agujerazo en parte del esplendido patio de la Universidad Laboral y tras estropearlo en gran medida, ocurrió (oh casualidad) que las empresas implicadas en la obra se esfumaron aquejadas de pertenecer a una de las tramas de corrupción del PP
De esto han pasado un montón de años y el agujero, como el dinosaurio, sigue allí. Ya no va a ser un Centro de Congresos, aquella fantasía (y negocio) se vino a pique (ahora será un Conservatorio de Música. Ojalá empiecen por arreglar el teatro por si también cambian de opinión, a mitad del camino, que al menos quede algo hecho).
Pero volvamos al hilo del asunto. Una vez que la Junta de CyL, gobernada por el PP anuncia que Zamora se queda sin centro de congresos (tal vez la única provincia de las 9 de CyL), el presidente de la diputación, el mencionado Sr. Maillo, sale en defensa de su partido y dice que en los anexos del remozado Teatro Ramos Carrión ira el centro de congresos.
Y entonces por arte de birlibirloque manda construir, en lo que iban a ser los garajes del teatro, 3 aulas. Bautizando el asunto como Centro de Congresos de Zamora.
Lo curioso es que, cual maldición, este “Palacio” de Congresos sigue siendo subterráneo, y sus 3 aulitas, hijas de un garaje, lógicamente están bajo tierra. En concreto en la parte trasera del Teatro como dijimos.
Siendo lo más curioso de todo que en el año de mayor sequia de la historia se haya confesado que las 3 aulas tienen goteras.
Aunque a lo mejor la gotera principal es que los que han demostrado que no sirven para nada siguen siendo votados para todo.
Paco Molina. Zamora 17 de Agosto del 2022
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