Zamora resucita

ZAMORA RESUCITA

Tras el Apoteósico Éxito de la manifestación del otro día a favor del Futuro de Zamora, se puede hablar de un antes y un después en nuestra historia.

Antes, desde tiempo inmemorial hasta el 21 de Marzo del 2000, todo fue un declive (según estudios de Cáritas y de Europa y de los Agentes Sociales, y del PP cuando gobernaba el PSOE, y del PSOE cuando gobernaba el PP, y de Izquierda Unida siempre).

Ahora, desde el 21 de Marzo del 2000 todo puede ser una Resurrección Sostenible

Esta tesis, la de la Resurrección y la del Éxito Apoteósico, hay que sustentarla en un dato evidente: es la primera gran protesta del pueblo de Zamora sin contar con el apoyo del PP, con lo que multiplicada por el factor corrector correspondiente, un 2, y luego por un 1,75 al no convocar el Alcalde, ni la Presidencia de la Diputación, que si estuvieron en el asunto del Cuartel pro Campus, nos da un equivalente a 35.000 manifestantes. Record mundial en la provincia.

Ante un fenómeno de esta envergadura procede hacer un doble examen. ¿A qué se pudo deber? ¿A quién se pudo deber?

Sin duda se ha debido a que la convocatoria era espontánea y surgía de la Sociedad Civil, es decir no surgía ni desde los militares, ni desde la Iglesia (aunque la bendecía), ni de la Judicatura y menos de los Partidos Políticos (de ahí el eslogan:  No vamos contra nadie, vamos a por todas).

Y es precisamente la Sociedad Civil la que le ha venido a decir a la otra (la no civil o incivil): “Me da igual si tengo que luchar antes o después de las elecciones, lo importante es que me convoquen fuerzas no partidistas, es decir, contradictorias, antagónicas, que eso es lo que me hace ver que nadie me va a manejar, que yo no quiero que me manejen, ni por Zamora”.

Y analizado, muy bien por cierto, el éxito, debemos ahora buscar a los triunfadores, siquiera sea para que quede constancia de su aportación a la Historia de Zamora, en las Hemerotecas.

Han sido esenciales José Herrera y Manolo Fuentes, de CCOO y UGT, líderes provinciales, que como los buenos conductores de los coches de Principios de Siglo, le han dado una y mil veces a la manivela hasta que el coche arrancó.

Pero sin duda fue Herrero Magarzo, líder de empresarios, empleadores y emprendedores, quien más merito debe llevarse de este éxito, pues demostrando una vez más que todavía hay clases, demostró la suya portando lo mejor de ella, su visión de futuro y riesgo. Y así como otros querían la manifestación cuanto antes, él supo templar, mandar y “entrar a matar” (en este caso dar vida) por Zamora escogiendo el mejor momento. ¡¡¡¡Después de las elecciones!!!!.

Es más, el éxito del PP no le amilanó y supo ver en la oscuridad que no era incompatible, que ya lo dice muy bien la Sociedad Civil: “a mí que me resuelvan los problemas y ya está”, que al fin y al cabo, como todos los políticos son iguales, tanto me da que me los resuelvan unos u otros.

Tal vez Herrero Magarzo, al enfrentarse al PP, se ha jugado la Alcaldía o la Diputación de Zamora. Craso error del PP si así es, porque si hay alguien con méritos para sustituir a Antonio Vázquez o Pilar Álvarez, que humanos ellos al fin algún día lo dejaran, ese es el hombre.

Hombre al que le honra aún más el haberse jugado todo su futuro político a cambio del futuro de todos, del futuro de Zamora.

Pero si Herrero Magarzo es el líder social que necesita toda comunidad para saltar adelante, líder tan esperado y necesitado por Zamora, no hay que olvidar que un pastor no surge aislado y así tenemos también a: Miguel Blanco, de COAG, que sigue arando nuestras mentes perezosas con semillas de esperanza; a Manuel Vidal, Cámara de Comercio, ese Técnico sin el cual no hay progreso posible; Luis Rodrigo, OPA; la fuerza de la espontaneidad, del entusiasmo, de las iniciativas.

Tal vez me olvide de alguien, pero no me olvido de esa mujer que las representó a todas, Nieves García, sindicalista/concejal que discreta y enfundada en un traje de época nos recordó que desde hace 100 años Zamora iba para atrás y debía ir para delante.

Todos ellos han abierto la puerta del día de mañana. Sigámosles.

Paco Molina

Año 2000.