EL
PARTIDO DE MI PUEBLO
En esto de la
política, echándole un poco de cara, se puede sacar un sobresueldo (y encima te
enseñan a jugar al golf y te dan alguna
medalla que otra).
Claro que para esto
no puedes estar en uno de estos grupos que entre miopía y utopía defienden lo
segundo, y encima piden a sus cargos públicos que den todo lo que ganan para la
causa.
Tampoco es plan
meterse en uno de los dos partidos grandes porque aunque hay más sillones (o
sea millones) a repartir, también es cierto que hay cola de espera para ocuparlos
y además hay que tener un padrino.
Quita de ahí. De
padrinos nada. Donde esté una madrina que se quiten estos cacicotes de toda la
vida.
Y para madrinas no
hay como la “patria chica”.
Esa sí que es una
madrina. Por eso voy a fundar un partido que se llame “El Partido de Mi Pueblo”
y su programa será sencillo y elocuente: Prometer a todos los de mi pueblo lo
mejor para el pueblo.
Poner en marcha un programa
así es barato: Para empezar el tema de la publicidad (que es lo que más se lleva)
está chupao. Sí, porque como en todos los sitios ya hay medios de comunicación
locales (periódicos, teles e incluso foros ciudadanos) y por definición tienen que
destacar lo local, es fácil deducir que estarán atentos y solícitos a cuánto
haga y no haga el Partido de Mi Pueblo..
Además todo el mundo
acabará votando al Partido de Mi Pueblo, porque ¿Quién no quiere, incluso más que
a su vida, a su pueblo? Aunque sólo sea porque si mejora su pueblo mejora él.
Ni que decir tiene
que el Partido de Mi Pueblo será apolítico. Incluso cuando tengamos mayoría en
el Ayuntamiento y en la Diputación mantendremos nuestro eslogan: “Ni de
derechas, ni de izquierdas, a luchar todos por el pueblo”.
Y no iremos contra
nadie. Ni siquiera contra los del pueblo de al lado. Es más, acabaremos
haciendo una unión de Partidos de Mi Pueblo, que nos convierta en un Gran
Partido de Mi Pueblos con Todos los Pueblos, con lo cual llegaremos a ser un
partido estatal pudiendo seguir diciendo que no lo somos.
Si claro, porque los
partidos estatalistas son mala cosa ya que hacen lo que les dicen en Madrid (o
Valladolid) desde los aparatos. Sin embargo los del Partido de Mi Pueblo somos
libres para pedir lo mejor para nuestro pueblo y basta.
No seremos
agresivos, y si no hay dinero para hacer lo que nos deben (la deuda histórica
tan histórica) movilizaremos a todo el pueblo, pero eso sí, sin ir contra
nadie.
Claro, porque cuando
estemos en las instituciones, como no somos políticos podremos pactar con
cualquiera y para eso es mejor no ir antes contra nadie y no herir susceptibilidades.
Que si no podemos quedarnos sin millones (perdón, sillones).
El Partido de Mi
Pueblo tendrá mucho auge en todas partes porque en todas partes ¡oh milagro! ocurre
esto: i) Existe una cancioncilla o bolero que es lo mejor del mundo y sirve de himno.
ii) Existen unos productos de la Tierra que con Denominación de Origen nos harán
ricos a todos. iii) La variedad del paisaje y una buena política de casas
rurales nos va a poner las botas. iv) Con cuatro infraestructuras no va a haber
empleador que no se pase por aquí a invertir y crear puestos de trabajo.
En fin que mi pueblo
es rico pero pobre, porque nos tienen manía y no nos meten en los presupuestos.
En nuestras listas
irán gentes independientes de reconocido prestigio. Yo el primero (claro, por
si sólo sacamos uno).
Y con la fiebre que
hay por potenciar los localismos y los “viva mi tierra” nos vamos aforrar.
Viva el Partido de
Mi Pueblo (que es el tuyo) .
Paco
Molina.
Publicado
en la Opinión de Zamora el 12 del Mayo del 2.002
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