La macedonia está servida

LA MACEDONIA ESTÁ SERVIDA

Nueve de cada diez personas progresistas prefieren la macedonia.

Y es que no es para menos. Al margen de la receta a aplicar para conseguir tan suculento postre, está el hecho de que, por ser mezcla de frutas, el plato se torna en fuente de vitaminas para el cuerpo.

De la macedonia se puede decir que resulta y es apetecible, digestiva y saludable.

Apetecible, por ese jugo dulce que impregna los trozos de las distintas frutas, y también por su aspecto de oferta variada ante los ojos.

Digestiva, porque procede de la unión natural de productos extremadamente naturales, como son las frutas.

Y saludable, por aglutinar el aporte vitamínico de cada uno de sus componentes.

Así que nos sentimos orgullosos de que el diario EL PAÍS haya comparado a Izquierda Unida con una macedonia.

El jugo dulce y apetecible de Izquierda Unida está en su concepción del método de trabajo político: unidad con libertad de criterios, imaginación y consenso.

Lo que hace digestiva a Izquierda Unida y por tanto una opción sana para el cuerpo social es su carácter de asociación con el fin primario de elevar el nivel de vida de los que menos tienen, de buscar la paz por la vía de la neutralidad y luchar contra el paro con la reducción de la jornada laboral y la mayor inversión pública.

Y lo que hace saludable a Izquierda Unida es su mezcla de movimiento social, de organización no rígida y de proyecto innovador, vivo y distinto.

Así que, si después de un primer plato de reconversión salvaje, adobada con cierre de líneas férreas, y un segundo de compra de armamento otanero salpicado de paro, todo ello regado por el aceite de ricino de la soberbia, usted quiere algo más apetecible, digestivo y saludable, recuerde que la macedonia está servida, y que le aproveche.

Francisco Molina. Candidato al Senado en representación de Zamora por Izquierda Unida. Carta: Publicada por el País y el Correo de Zamora 8 20 de Mayo de 1988 u 89