Sobre
IU : LA DEMOCRACIA Y SU GRACIA.
La razón de ser de
la democracia es que cuando no se sabe qué camino seguir lo lógico es votar
para ver por dónde quiere ir la mayoría.
Se supone que así,
aún en el caso de coger el camino equivocado, el sufrimiento será menor para el
grupo o al menos para un menor número de personas.
Si a eso añadimos
que en política, cuando se escoge un camino nunca se sabe cómo hubiera sido en
caso de optar por el otro, pues viva la democracia como criterio de respeto a
todos y de brújula que guíe.
Así las cosas, en
Izquierda Unida de España la mayoría decidió dos cosas fundamentales. Una, que
el nuevo líder o dirigente principal sea Alberto Garzón, y la otra, que se traten de abordar las sucesivas elecciones en Confluencias, o Convergencias o Uniones
Electorales con otras fuerzas políticas.
No obstante, sobre esa
segunda opción, encima se garantiza con el compromiso de que cada confluencia
electoral debe ser refrendada por la mayoría de los militantes de la zona
afectada.
Respecto al futuro
(elecciones locales del 2019) eso supondrá que en las Europeas se vaya en
Confluencia con Podemos y Equo al menos, (ya se votó), y en cada Autonomía y
cada Ayuntamiento como decidan los respectivos militantes de IU.
Del pasado conviene
recordar que IU decidió acudir a las Elecciones Generales del 2016 en convergencia
con Podemos en lo que se llamó Unidos Podemos.
Esto, unido a que a
algunos no les convencía Alberto Garzón como líder, generó un sector dentro de
IU, minoritario eso si, cuyo mensaje espiritual era que los del sector mayoritario
lo que pretendían era que desapareciera IU.
Dado que eso no ocurrió ahora predican que IU
existe pero no se la ve.
Como en aquellas
elecciones generales del 2016, se perdieron un millón de votos (respecto a la
suma aritmética del 2015 (cinco millones de Podemos y uno de IU), y en las elecciones andaluzas
la unión produjo también un bajón de votos, esos compas minoritarios consideran
que tienen razón y que como ellos dicen “en política la unión no siempre suma”.
Sin entrar en la
carambola de que su interés porque IU y Podemos vayan separados es sólo
comparable al interés que tiene la derecha social en el mismo sentido,
hablemos algo de números antes de seguir.
La ventaja de las
uniones, en el sistema electoral español, no solo hay que calibrarla en ver si
sumas o no.
Nos explicamos, en
las elecciones generales del 2016, a pesar de que se perdieron un millón de
votos, el número de Diputados se mantuvo. Y en las elecciones andaluzas del 2018, aunque se perdieron
más del 33 % de los votos, las pérdidas en Diputados fue únicamente del 15%.
Es decir, la unidad
tiene sus ventajas incluso cuando se recula.
Pero para qué darle
vueltas. Lo irrefutable es que democráticamente se eligió un camino en IU, y se
está siguiendo.
Y ante ese panorama,
ya desde la Declaración de Zamora (y otras que son eco de la misma) los
minoritarios en IU han persistido en desgastar públicamente al equipo de
Garzón, siendo lo más chocante que en sus papeles ponen que una alternativa que
no deben desechar es la
de irse de Izquierda Unida (si no se salen con la suya).
En este plan, salió una
noticia nacional de peces gordos de IU (sector minoritario) el 13 de Diciembre
del 2018, que tras acusar a la actual dirección de IU de generar, nada menos
que la aparición de la extrema derecha en España (por su incompetencia política)
piden una Asamblea Extraordinaria (de la que no cuentan qué harían si vuelven a
perderla).
Caliente aún el asunto,
los compas de Actúa (el partido creado por Gaspar Llamazares) anuncian también
a escala nacional que se van a presentar a las elecciones locales del 2019….¡¡¡en
confluencias!!!.
Como en los
permisivos estatutos de IU no cabe aun que te puedas presentar en unas elecciones
contra tu propio partido, es fácil que se vayan de IU o sean expulsados si no
confluyen donde confluya IU.
Lo que en todo caso,
debe hacer reflexionar a estos y a los que aún aguantan siendo minoritarios.
¿Es esto normal en un partido democrático como es IU?.
Si añadimos que a las
elecciones del 2019, en cada sitio se va a ir como quiera la gente de cada
sitio, tal y como estos compas pidieron en su Declaración de Valencia ¿Qué es
realmente lo que quieren?.
Por lo demás: El balance
es éste: i) IU no ha desparecido. ii )Tras
las elecciones generales del 2016; IU
pasó de 5 Diputados, a 8, mas 2 senadores (el doble de fuerza); y iii) en Andalucía se pasó de 5 a 6 diputados, a pesar de que la
convergencia se redujo en 3.
Añadamos a esto que
IU nunca tuvo tanta visibilidad, ni tanta capacidad
de influencia, siendo pieza
fundamental en lo mejor del Siglo XXI de la Democracia Española, la Moción de
Censura.
Y respecto a la
aparición de la extrema derecha, ¿también son Pablo Iglesias y Alberto Garzón
los responsables de los partidos similares del resto de Europa?.
En fin, será que hay
cariños que matan.
Paco
Molina. Zamora 15 de Diciembre del 2018
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