sábado, 5 de diciembre de 2015

BONOBOS Y BOBOBOS

BONOBOS Y BOBOBOS

Un próximo libro que va a salir en breve, va dedicado a "quienes les gusta el sexo por encima de la media".

Hoy me arrepiento de no haber añadido "y a los bonobos".

Tal vez usted no haya oído hablar de los bonobos, pero no se extrañe, el asunto de los bonobos es casi Secreto de Estado (de todos los estados).

Lo va a entender a la primera. Resulta que los bonobos son los animales (una variedad de mono) que más se asemejan al ser humano  en cuanto a eso del código genético.

Es decir son los que tienen los genes o el ADN o el árbol cromosómico o el mapa del genoma o como se diga, mas igualito que el nuestro.

Vamos que la diferencia es mínima. En términos de Darwin, o sea según criterios de evolución, ello supone que casi con seguridad,  o nosotros somos una imperfección o desviación de la especie de los bonobos o ellos un humano defectuoso que luego prosperó.

Me inclino más bien por la primera versión.

Hasta aquí puede que vos ya este algo sorprendido pues si tiene documentación (mental) sobre el asunto pensaría que nuestros gemelos eran los chimpancés o cosa así, cuando en realidad lo son los bonobos, que mas que gemelos son nuestros mellizos.

Pero, ¿por qué nos han asimilado a los chimpancés y no a los bonobos?

Porque los chimpancés, con ser mas listos que nosotros hacen algunas bobadas que permiten que nosotros nos sintamos superiores.

Sin embargo, ¡Ay! qué sin embargo es el sin embargo de los bonobos.

Resulta que los bonobos no conocen la violencia, resulta que los bonobos cuando van a hacer el amor no pelean por la presa (perdón pareja), resulta que los bonobos ni son monógamos, ni heterosexuales, ni homosexuales, ni bisexuales, ni nada.

Y no son nada porque lo son todo.

Cuando se ha estudiado a los bonobos, el susto ha sido tremendo, porque de los animales que existen los que más se asemejan a nosotros resulta que se pasan prácticamente el día fornicando (si es que les place. que no se sabe qué hacen cuando les duelen las muelas).

Pero es que el asunto llega a ser más preocupante.

¿Qué hacen cuando se encuentran en situaciones de su-pervivencia? Por ejemplo hay un sólo plátano y mucha hambre y aparecen dos ejemplares de bonobos.

Pues resuelven el asunto a "amorazo limpio” y además lo mismo les da que sean ambos machos, o hembras o de distinto bando.

Lo solventan todo haciendo el amor. (Debe ser que creen en eso de contigo pan y cebolla, cambiando el "contigo- por el "con todos y todas me sobran hasta el pan y la cebolla").

Vamos que si fueran tan memos como para tener problemas por la independencia de su país, en vez de terroristas se convertirían en "amoristas sin tregua” y aquí tendríamos que hacer manifestaciones para acabar con tanta indecencia..

 Claro que, por lo mismo, a los demás nos darían lo mismo las manías de unos y otros y no se nos ocurriría tener que imponer el principio de autoridad, o mantener por encima de todo la dignidad, u otras cosillas que generan enfrentamientos sin cuentos.

Fíjense si los bonobos se parecen a nosotros y si usted sabe poco de ellos (porque se lo ocultan) que hacen el amor también en la postura del misionero. Mirándose a la cara mientras se refocilan. Incluso cuando uno "visita" a una (o uno) por poniente, el pasivo gira la cabeza y mira a los ojos del amor de su vida (en ese instante).

Claro que al no ser violentos están a punto de extinguirse como especie.

Pero no sufra por ellos, que como dice su único refrán: "que nos quiten lo bailao".

Ahora que ya está usted intrigado querrá saber también cosas de los bobobos.

Y no se fie de nosotros, unos  “sabelotodo” que nos autonombramos: Homos-Sapiens. ¿Por quë?.

FRANCISCO MOLINA. La Opinión de Zamora. Imperecedero


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