VIVA
EL FÚTBOL
Afortunadamente ya,
hasta las mujeres se están dándose cuenta de lo importante que es el fútbol.
No hay más que ir a
la fuente de la Marina cada mes de junio, que es cuando el Real Madrid suele
haber ganado una Liga o una Copa de Europa, y comprobar la cantidad de
camisetas mojadas que por allí emergen.
No hay nada como el
fútbol. ¿Qué sería de la vida sin él?
Los mismos veranos,
en la medida en que no hay fútbol, exigen que nos movamos de un sitio a otro a
ver si se nos calma el mono.
El mono del aburrimiento.
Ahora bien, tampoco
seamos cursis, aquí se habla del fútbol de competición, Liga o Champions.
Ni siquiera se habla
de los partidos de la selección española, que no sirven para nada.
Es más, estos partidos
rompen el ritmo de la Liga creando fines de semana sin balompié, que se
convierten en verdaderos agujeros negros del aburrimiento.
Habría que recoger
firmas para pedir que las selecciones nacionales, o no
jueguen nunca o solo jueguen en verano, cuando no hay fútbol espectáculo.
Aunque tampoco se debe
caer en la mojigatería con lo del futbol espectáculo.
El bueno es el fútbol
de competición y por tanto el resultado.
El gustazo te los
das cuando ganan los tuyos y ojo, si pierden los del "cuñao”.
Que de eso se trata,
de que traguen quina nuestros enemigos no declarados (y por supuesto los
declarados).
En este sentido, que
un encuentro dure 90 minutos me parece una bobada de conservadores. Con partidos
de 60 minutos, podrían descansar los pobres futbolistas y jugarse liga los fines
de semana, y los miércoles y jueves que no hubiera champión.
Dos jornadas a la
semana, y quien no aguante al paro.
Y hablando de
conservadores. Solo quien disfruta con el fútbol tiene cultura suficiente para
entender el mensaje, que por nuestro bien, nos envía el presidente del Gobierno
señor Aznar.
Tenemos que estar en
primera fila en la guerra contra Irak para que España pase a ser un país de
Primera División.
Pues claro que si. O
es que no nos gustaría que nuestra bien amada Zamora fuera considerada provincia
de la División de Honor, y no como ahora que nos cierran hasta las fabricas de
cerraduras (y no lo digo por El Candado).
Además, Aznar tiene
razón cuando piensa que piensan los de la oposición que si los bárbaros beduinos
matan a un cristiano español y vuelve en féretro pueden ganar las elecciones.
Así piensa Aznar. Lo
mismo que es de suponer, según esa teoría, que los de las funerarias se frotan
las manos ante cada catástrofe. Que los policías celebran el aumento de delincuencia.
Que los médicos disfrutan con las epidemias. Que los chapistas descorchan
champan delante de las teles escuchando el balance de la operación retorno. Los
sindicatos esperan expedientes de regulación de empleo como el llover. Los militares
rezan para que haya más guerras y se les valore. Los maestros viven con la esperanza
de que siga habiendo analfabetos a quien enseñar. El comerciante mira de reojo
a ver si se hunde el vecino. Los dentistas están erre que erre poniendo velas a
Judas Iscariote para que consumamos chocolate. Y cualquier mortal está
esperando que la palme otro mortal para ocupar su puesto de trabajo.
En fin, que aquí,
los únicos que no quieren que pase nada malo son los de las compañías de
seguros, para así cobrar la prima y no poner la cama.
Lo que les digo.
Donde esté el fútbol que se quite lo demás.
Y ojala que España
esté siempre en la Primera División de las naciones.
Que además es fácil.
Se trata de estar en todas las guerras con los que ganan y de matar sin que te
maten.
Parece arduo el
meter un gol así, pero con un especialista del "golpe franco" como Aznar...
Nota: Harto como
esta uno de tener razón, resulta que ya escrito este escrito, un militar español
ha muerto en Irak, viniendo a dar la razón el hecho a la tesis irónica de este
articulo.
Jugar con fuego y
pretender no quemarse es una irresponsabilidad de los Gobiernos.
FRANCISCO
MOLINA. La Opinión de Zamora. Imperecedero
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