lunes, 18 de julio de 2022

Y NOS PAGARÁN POR NO TRABAJAR.

 


Y NOS PAGARÁN POR NO TRABAJAR.

Consecuencia del lavado de cerebro al que nos somete el Poder diariamente con sus mentiras el pueblo ya no sabe que “lo bueno es bueno y lo malo es malo” (que diría el pesador zamorano Agustín García Calvo).

Y en este orden de cosas, ante la oferta de que exista una Renta Universal Básica, la gente dice que no quiere una “paguita”, que eso la degrada, que ella lo que demanda es el derecho a tener un trabajo con el que aportar valor añadido a la patria en la que vive (y por la que moriría si fuera preciso, que para machote él, o ella, que en esto no hay fronteras).

La Renta Universal Básica es una “paguita” que se le daría a cada ciudadano/a por el mero hecho de existir.

Cuando aparezcan en escena los robots dicha paguita, o se impone o estaremos ante la peor revuelta de la lucha de clases (la media y las bajas contra la exquisitamente alta).

Sobre la importancia de la Renta Básica apuntemos que sólo con una Renta Universal Rural (es decir una paguita para quienes vivan en localidades de menos de mil habitantes) se repoblará la España vaciada.

Todo lo demás son monsergas. Siendo la más peligrosa la de nuestras derechas patrias que en su ignorancia supina de todo pretenden rellenar, por ejemplo la Zamora vaciada, a base de partos de las zamoranas.

Siendo aquí a donde queríamos llegar, pues mientras aún no nos ha entrado en la mollera la necesidad de una paguita sin trabajar, lo que viene es que nos van a pagar por no trabajar.

Miren. Volviendo con lo de repoblar los espacios del planeta vaciados (la parte rica del globo).

Según los últimos datos demográficos, en el planeta Tierra ya pasamos de los 8.000 millones de habitantes, y lo que es peor, cada año nacen 50 millones más de personas de las que mueren.

Es decir que crecemos a razón de 50 millones por año. O sea, en 10 años seremos 500 millones más como poco.

Este es uno de los factores que más contribuye al cambio climático, y el cambio climático ya presente (no sólo lo dice el calor extremo sino también la ciencia escrupulosa) es uno de los factores más peligrosos para llegar al final de la especie humana (junto con la guerra nuclear).

Y para frenar tal carrera hacia el abismo, según nos dicen los ecologistas, y tienen razón, habrá que frenar, más pronto que tarde, casi en seco el consumo de energía y materia (que son la misma cosa desde que lo verificó Einstein).

Llegando aquí el razonamiento donde queríamos: nos pagaran para que no trabajemos. Es decir no nos darán una paguita que  a lo mejor nos convierte en vagos y no trabajamos, no. Nos darán una pagaza para que no trabajemos y al que pesquen trabajando se la quitarán, y puede que también la vida por asocial.

Explicación. En la actualidad todos vivimos gracias a que vendemos algo (lo llamamos trabajar). Unos venden pepinos y otros venden el teorema de Pitágoras.

Todo esto es más evidente observando un comercio. En él vemos un material (por ejemplo objetos de regalo). El dueño compra el objeto a X euros y lo vende a Y euros siendo Y>X.

Con esa diferencia (ganancia) vive. El problema ecológico está en que para hacer ese trabajo tiene que: ir a trabajar (consumiendo energía), comprar un género que hecho de materia y energía ha consumido energía. Pero es  que a su vez, para que nuestro comerciante pueda vivir, tiene que presentarse en la tienda un consumidor que habrá consumido energía al ir y luego al volver feliz a casa, con un objeto que quedará pasivo, adornando su hogar o su cuerpo.

Entonces, como llegaremos a un punto (y por culpa de la guerra contra Rusia puede que sin tardar) en que no quede energía para consumir haya que controlar su gasto.

Y es cuando llegados a esa fase se verá que es preferible darle al comerciante lo que pensaba ganar pero sin que trabaje (sin que consuma energía).

Obviamente habrá profesiones que tendrán que seguir currando para proporcionarnos comida, vivienda, salud, justicia, enseñanza, etc. Pero el resto será pagado para que no trabaje. “Por favor no consuma usted energía”.

Esto nos llevara a prohibir muchos tipos de viajes y juergas quedando  abocados como género humano a tener que disfrutar prácticamente solo del sexo (que es el placer más ecológico que existe, al ser gratuito en términos de balance energético y muy estimulante en sí).

Comprendo que a muchos esta idea de pasárselo bien sólo a base  de sexo y ternura les parezca libertinaje y no libertad, pero, o eso o la especie humana se va por el desagüe de la Historia.

Para empezar vamos a consumir otra vez carbón cuando se dijo que era algo malo, y todo por estar en una estúpida guerra, si bien es verdad que todas son estúpidas porque en todas perdemos todos, menos los ricos.

PD: Cada ciudadano con ese dinero, que recibiría por no trabajar podría comprar pocas cosas, pero estas serian únicamente las imprescindibles para vivir y las podría tener cualquiera, o sea que mejor imposible. Ah! y el sexo no sería obligatorio.

Paco Molina. Zamora. 18 de Julio del 2022

No hay comentarios:

Publicar un comentario