miércoles, 13 de noviembre de 2019

FILTROS CONTRA LA INFILTRACIÓN DE VOX.


FILTROS  CONTRA  LA  INFILTRACIÓN  DE  VOX.

Tras el rotundo éxito y simpatías despertadas en todo el mundo con motivo de la revolución soviética (Rusia 1917) los poderosos de los paises ricos, ante el miedo a perder sus privilegios y obscenas riquezas, potencian, entre los movimientos obreros y populares, a partidos que actuaran a modo de infiltrados.

Es ese carácter de partidos infiltrados el que, como en el caso de cualquier infiltrado en cualquier causa, lo que hace que tengan que camuflarse con sus mensajes y metas.

Dicho fenómeno camaleónico lo vemos más claro aún que en el fascismo, en el caso del partido de Hitler, que se llamó, cómo no, Nacional “Socialista”.

Ese proceso de intromisión en el mundo obrero y clases medias, lo cumplió en España la Falange, que para infiltrarse lo más posible entre los sentimientos de moda, decidió que sus miembros se llamaran entre si “camaradas” (usando nada menos que la misma nomenclatura que los, por ellos, odiados comunistas).

Pues bien, actualmente, en esa línea de infiltración en los sectores indignados de la sociedad española, además de camuflarse como gente de abajo que está harta de “los progre que viven bien” y demás políticos que arruinan España; los de Vox lanzan mensajes ideológicos más falsos aún que sus proclamas de bienestar (que en el fondo se resumen en que, los ricos, a los que sirven, no paguen impuestos, y que no haya pensiones públicas solventes para que tenga que haberlas privadas y que se forren   los bancos).

Y entre esos mensajes ideológicos está la que ya se ha hecho célebre frase de  “Sólo los ricos pueden permitirse no tener patria, pero los obreros la necesitan, no pueden vivir sin ella”.

 Pronunciada por el líder de Vox en un debate electoral, ya sabemos que la copió de un teórico de la falange (un tal, Onésimo Redondo, o algo así).

Pero, ¿por que dijo el célebre falangista esa bobada (demostraremos que es falsa) en los tiempos en que la dijo?

Pues porque como ya contamos, el camuflaje político tiene como misión  contrarrestar desde dentro al otro.

Y en aquellos años (próximos en el tiempo a la Revolución Bolchevique) la idea era la contraria.

La 1ª Guerra Mundial había hecho evidente que los países (las patrias) eran de los ricos del lugar, ricachones que en su ansia enfermiza de querer ser todavía más poderosos, declaraban las guerras de “su” patria contra otras patrias, en las que morían los obreros, los campesinos, el pueblo; mientras los poderosos, ganaran o perdieran, nunca sufrían.

Entonces, como consecuencia de esa evidencia, las gentes aprendieron que la única patria no enfermiza es la Humanidad, que los trabajadores son hermanos de los trabajadores de otros pueblos antes que de los ricos de “su patria”.

Cuaja el Internacionalismo Proletario como mandamiento ideológico. Y eso es un peligro, porque se les acaba el chollo a los ricos de cada patria.

Por eso, el retórico falangista suelta su soflama: “Los ricos pueden permitirse el lujo de no tener patria pero el obrero no”.

Mentira donde las haya: Veámoslo.

Es verdad que los híper ricos, como viajan mucho y al tener dinero les aceptan en todos los países, aparentemente “no necesitan tener patria” pero eso no es así.

Comprobémoslo. Empecemos por traducir la palabra patria, de carácter poético, por su homóloga y menos sentimental que no  es otra que  Estado. Patria=Estado

Un Estado requiere un territorio, con unos habitantes y unas estructuras armadas que impongan un orden.

Ese orden, defendido por leyes y fuerzas del orden (policías, ejércitos, etc) a quien más protege es a los ricos como va usted a ver a continuación.

Venga, hagamos un esfuerzo de imaginación; supongamos una patria sin orden, sin leyes, sin impuestos, sin nada.

¿En ese estado de cosas quien correría más peligro, el rico con sus riquezas o quien no tuviera nada?

En efecto, es evidente que el capitalista necesita de un Estado que proteja sus bienes. Pero hay más, necesita un Estado (vulgo Patria) que le ayude a multiplicarlos.

Véase el caso de los Capitalistas cuya Patria es EEUU, si no pertenecieran a esa Patria, no podrían dar golpes de estado en países con riquezas (petróleo, minerales, alimentos) para quedárselos ellos.

Por el contrario, son los parias de la Tierra, los que viven de su trabajo, los que no necesitan de ninguna Patria (salvo que esta les proteja de los ricachones y sea socialmente justa) como demuestra el hecho histórico de que millones de seres humanos han emigrado buscando el pan para sus hijos, y al final, aunque han echado de menos su patria (chica) se han adaptado a su nueva realidad.

Resumiendo. Menos retórica. Los ricos son los que no pueden vivir sin patria (sin Estado) que proteja sus intereses y bienes; y los que viven de  su trabajo pueden vivir en cualquier patria.

Aunque lo lógico, es que los trabajadores, puesto que son los que crean riqueza, vivan donde  quieran, y que esa sociedad sea justa, teniendo todos en común lo que es imprescindible para llevar una vida digna, y no tener que morir, ni sufrir, por culpa de la ambición de los Capitalistorricos (que son los que han declarado todas la guerras.  En nombre de la Patria, eso si, porque les avergonzaba hacerlo en nombre de su bolsillo).

Paco Molina. 13 de Noviembre del 2019.

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