miércoles, 11 de julio de 2018

DESNUDOS, RELIGIONES Y REDES SOCIALES.


DESNUDOS, RELIGIONES Y REDES SOCIALES.

Es evidente que no hay Dios puesto que no hay evidencias de que lo haya.

No obstante la gente cree que hay Dios, luego supongamos  que la mayoría absoluta no se equivoca, en cuyo caso sí hay Dios (al menos durante lo que dure este escrito).

Llegados aquí vemos que los mismos que dicen que hay Dios nos dicen que quienes saben interpretar lo que Él quiere son las religiones.

De estas quedémonos con las monoteístas (las que adoran a un sólo Dios), o sea la Judía, la Islámica y la Cristiana (esta con sus ramas, católica y protestante).

Aunque los tres dioses de estas religiones son distintos, curiosamente los tres, según sus ministros o sacerdotes, nos advierten a los mortales de los peligros del desnudo.

El desnudo, el cuerpo desnudo, algo debe tener de malo puesto que se prohíbe en todas las latitudes (por nuestro bien).

Sobre todo si es el desnudo femenino (aunque en el caso de los hombres no se sabe si su desnudo está perseguido con igual intensidad o es que simplemente no se produce porque los machos somos buenos, obedientes de Dios, por naturaleza).

Tal coincidencia en la persecución del desnudo como cosa mala, nos debe llevar a la conclusión de que en efecto, el diablo anda suelto entre tetas, pezones, clítoris, vaginas, penes, testículos y nalgas.

Aceptado eso, y considerando que el hombre no es muy dado a la desnudez, centrémonos para el estudio de este fenómeno maléfico (la desnudez) en el desnudo de las mujeres.

En ese aspecto no cabe duda de que la religión más pura y sagrada seria el islam puesto que obliga a las mujeres a ir tapadas de pies a cabeza (incluso para bañarse).

Nota: Puestos a  considerar el desnudo femenino como pecado, entonces el obligarles a taparse la cara (burka) me parece un acierto puesto que no hay nada mas turbador, ni bello que una cara de mujer.

Siguiendo con el ranking de perfección entre las tres religiones con Dios verdadero, en segundo lugar debería quedar la Judía (versión ortodoxos). 

Que aunque comete el desliz de dejar a la mujer con la cara descubierta, no solo la obliga a tapar exageradamente el resto del cuerpo, sino que le impone usar peluca para evitar (supongo) que se suelten la melena.

Y llegamos así a la versión cristiana (católica y protestante) de las religiones.

Aquí debemos confesar que las costumbres son cada vez más disolutas, por lo que no sabemos si es por permisividad de su Dios (o su Iglesia) o porque el desmadre es padre.

Pero ¿Podemos decir que en el Mundo Libre el desnudo no es un mal en sí?

Ni hablar. Tomemos para el estudio del asunto la conducta de las empresas que controlan la Redes Sociales (por ejemplo Facebook).

En Facebook se dice que tienen un algoritmo (un sistema) por el cual una máquina detecta un desnudo (bueno, “ve” lo fundamental de un cuerpo al aire libre según el criterio del programador del   artefacto censor) .

Entonces, en cuanto eso ocurre, la foto pecadora es eliminada inmediatamente., buscando sin duda la salvación de las almas de los creyentes (y de los no creyentes) puesto que quedamos en que Dios considera el cuerpo humano de lo peor que hay (de hecho los enemigos del alma son el Demonio, el Mundo y la Carne, según el Estado Vaticano).

Con ser eso raro, la eliminación fulgurante de los desnudos de esa red social, tiene una cierta lógica, pues como el desnudo es malo (aunque sea porque sí), en la medida en que te quitan un desnudo de la vista, te están haciendo un favor (evitarte el ir al infierno).

Pero la censura se vuelve diabólica cuando resulta que Don FaceBook, si quien puso la foto pecaminosa reincide, le castiga arrojándolo del paraíso de la red social. Castigo que va en aumento cuantas más veces insistes en poner sucios desnudos (para la maquina todos son sucios, desde el que cuenta las partes de la próstata o los ovarios  en un libro de ciencias naturales o  las picardías de un comic).

Es decir, esta red social, se considera con el derecho o el don de educar a los ciudadanos, puesto que  a los dos o tres castigos huyes del desnudo, o de lo que lo parezca, como de la peste.

Y lo que es peor, con esa conducta se está predicando, en pleno siglo 21, que la desnudez del cuerpo es algo maligno.

A lo que si añadimos que realmente no hay otro tipo de censura (afortunadamente) es que entonces es el cuerpo la causa única de todos los males (y de todas las malas).

Lo cual es algo dañino para la libertad, la verdad y la evolución hacia un mundo mejor.

Porque. Si ya no sólo los tres Dioses verdaderos prohíben el desnudo, sino que también lo hacen las tres redes sociales  más poderosas, será que en efecto, la causa de nuestro desastre de sociedad está en los cuerpos desnudos.

En cuyo caso, mujer u hombre, cuanto más tapados vayan mejor para todos, y por lo mismo pero al revés, cuanto más destapadas más p…¿perdidas?.

Ay!! Señor!! perdónales que no saben lo que hacen (los censores).

Paco Molina. Zamora. 12 de Julio del 2018

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