sábado, 23 de enero de 2016

PÓNGALE NOMBRE

PÓNGALE NOMBRE

El último pleno fue de los que se llaman de trámite. No habría mucho que contar de él, pero como la intención de estos escritos es que usted vaya conociendo el Ayuntamiento de Zamora por dentro, vamos a explicarle un caso que es buen ejemplo de la "Rapiña recaudatoria" con que la mayoría gobernante quiere tapar el pozo sin fondo económico que creó en su día con su mala gestión.

Imaginen un matrimonio que vive solo. Ambos con más de 80 años cada uno.

Él con un gran volumen que le dificulta los movimientos, aún más que la edad.

Ella con el encanto y tamaño de la mayoría de nuestras amigas de esos años: con la fuerza del coraje de ser mujer, pero sin esa otra fuerza llamada bruta.

Él, cae en el cuarto de baño,  con tan mala suerte que por abrirse la puerta hacia dentro su propio peso impide que se pueda entrar en la habitación para ayudarle.

Su esposa se ve incapaz y llama al resto de la familia que vive cerca.

El yerno, de buena complexión  intenta todo, pero no hay manera.

El gran cuerpo del hombre, caído en el suelo, junto a la puerta. impide que esta pueda ser abierta; por otro lado ha caído y puede haber sufrido un daño que necesite atención médica urgente.

No se trata de Hamar a un médico, ni a un cerrajero: el problema está en que la puerta no se puede desplazar porque el hombre, que esta caído e inerme, se ha convertido, involuntariamente en una cancela.

Pero como vivimos en una sociedad civilizada y con recursos, entre los servicios que tenemos y que pagamos con los impuestos habituales esta el cuerpo de bomberos.

Les llaman y llegan solícitos, gentiles y eficientes.

Utilizan el hacha y su experiencia, y todo queda resuelto felizmente.

Lo celebran, familia y bomberos.

Pasan los días y el Ayuntamiento le pasa "al caído" una minuta de 11.000 pesetas por el alquiler (la frase es mía) del cuerpo de bomberos.

Son 5.000 pesetas de un coche (o camión), 2.000 por cada bombero (4.000) y 2.000 por un cabo (único detalle socialista de todo: se cobra lo mismo por el cabo que por el bombero-raso: algo es algo).

Por si no se lo creen adjunto la factura (tachando claro a los afectados).

Desde 1992. PSOE y CDS (sus concejales) decidieron "alquilar" la policía municipal y los bomberos.

IU protestó, lo denuncio y alertó.

Se nos acuso de alarmistas, pues al fin y al cabo todo lo acabarían pagando las compañías de seguros (decían).

Hoy vemos un caso de los muchos, en que paga, como siempre, el ciudadano corriente.

Hay cosas que no tienen nombre.

Esta si lo tiene: póngaselo usted.

Post-data: por supuesto que el dinero no es para los bomberos.


Francisco Molina (Zamora). Concejal de IU. La Opinión de Zamora. Hacia 1993

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