sábado, 26 de abril de 2014

¿Cómo que no has roto nunca un plato?


PREGONCILLO DEL DÍA……DE LA CERÁMICA

Querida manceba y querido mancebo. Polvo somos y en polvo nos convertiremos, pero en el camino, el polvo que somos mezclado con el agua del valle de lágrimas en que estamos, se convierte en barro, y el barro en cerámica.

Hoy, amigos del alma, hoy amigas del cuerpo (y viceversa), desde esta emisora desmelenada, celebramos el Día de la Cerámica.

¡Gran día, pardiez! Para que tú, que nunca has roto un plato, te decidas a romper, no ya un plato, sino también, un botijo, una fuente, una tinaja, una cazuela, un horno.

Hoy, roto tu sensato pasado, tras romper el primer plato de tu vida, puede ser ese momento a partir del cual moldees tu futuro, dándole una forma hermosa, valiente y agradable.

Y la mejor forma de romper el primer plato, eso sí, de cerámica, es que te agencies diez mil euros; que aunque uses ropa interior de artesanía te vayas a la verbena infantil; que enterado/a de qué escaparate ha ganado el primer premio, rompas la luna; que en el torneo de baloncesto infantil hagas pasar a tu jefe o suegra por el aro; que te presentes en la final de Villar Romano vestida de Cleopatra/o; que le tires con un botijo a Viriato en la feria de la cerámica y si le das, te premies con un producto de la tierra; que te metas en una tinaja y cuando pase el gobernador para ver la exposición le preguntes “¿Es hora ya?”, como si él fuera Alí Babá y los otros los cuarenta ladrones; y por último lígate a un Mecano, toma un Taxi y vete al Gabinete Caligari con toda la Banda de Fomento Musical, a dar la nota.

Así chavala, así chaval, tengas la edad que tengas, habrás roto tu primer plato y además, en el Día de la Cerámica.

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