EL PSICOANÁLISIS

EL PSICOANÁLISIS

Los psicoanalistas para conocer a alguien no le preguntan cómo cree que es, ni le piden se autodefina pseudocríticamente, simplemente le invitan a que hable de lo que quiera, pues ese parlotear en libertad hará el retrato ("por la Boca muerde el pez").

El Pleno del 28 de diciembre en el Ayuntamiento, puede servir un poco para valorar las piezas que hay en los sillones de "las panaderas", ya que al tratarse en él cuestiones resueltas se ve que la gente habló por hacerlo y permitió así, curiosamente. conocerles mejor.

Había que votar dos cosas: la cesión de un local a la Federación de Vecinos (resultado: PSOE-CDS-IU sí; PP no) y ver qué pasa con las alegaciones sobre las tasas y la aprobación definitiva de éstas (aquí el final fue PSOE-CDS 13 votos, PP e IU oponiéndose 11).

Pero a lo que se va. Al psicoanálisis. El PP se infla a enumerar leyes, a discrepar en la forma (y no en el fondo) de las cosas, mientras mantiene su tesis de que "pretende ser una oposición constructiva que contribuya al Gobierno de la casa".

El PSOE le acusa de ser así porque el portavoz es abogado.

Ni idea; el PP ha de ser "legalista y formalista" y no puede ser oposición total porque es un hecho nacional y mundial (Guerra del Golfo) que PSOE y PP no difieren más que en las maneras, en cualquier aspecto fundamental del quehacer político.

Mas como han de desmarcarse para parecer diferentes, qué remedio le queda al PP que recurrir a lo churrigueresco del articulado legal.

El PSOE, con león de guarda-espaldas, tira para adelante, pero sus continuas alusiones a las titulaciones de otros portavoces sin venir a cuento, indican una cierta inseguridad, que no tienen por qué tener pues son los más queridos, aunque... "hay cariños que matan".

La labor del CDS para no ser borrado del mapa, dada la falta de iniciativa propia (todo lo vota con el PSOE), se traduce en largas exposiciones en las que pormenoriza al detalle tratando de hacer ver que existe su tarea, al tiempo que da coces al PP tan al tuntún que se convierte en pararrayos (¿indirecto?) del PSOE.

El concejal de IU, ajedrecista, en un pleno de encefalograma piano hace un gambito (dejarse comer un peón a cambio de otras ventajas) y se limita a provocar ("Hoy, día de los inocentes, es el ideal para que el PSOE diga que las tasas solo suben el 8%").

Nada menos que el primer teniente-alcalde es el que cae en la trampa: llama al de IU bufón y anuncia al personal que PP e IU están en connivencia.

Quemó sus naves demasiado de prisa, con lo que descubre la preocupación que les produce la tarea de IU a solo seis meses de andar entre los papeles de la ciudad.

Respecto a la coincidencia en votaciones entre PP e IU, los seguidores de "en pleno pleno" (yo publicaba todos los plenos bajo ese epígrafe, comentados, en los dos periódicos locales La Opinión y El Correo) pueden hacer recuento y verán que han coincidido. mas veces PP y PSOE-CDS contra IU que cualquier otro resultado.

¿Por qué entonces este error en el análisis del PSOE?

Francisco Molina. Concejal de IU en el Ayuntamiento de Zamora. La Opinión de Zamora. 1992