PRESENTACIÓN
(fallida) DE ALBERTO GARZÓN.
Que no haya líderes
no es malo.
Pero que haya líderes
es buenísimo.
La historia de los
pueblos se acelera hacia la emancipación ¡¡cuando aparece un líder!!.
Esto no lo digo yo,
lo dice LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD.
La derecha tiene tan
clara la necesidad de líderes: que los fabrica, atribuyéndoles virtudes y
cualidades falsas.
Dicho esto os
recuerdo el aserto, aparentemente religioso, pero que surge de la Sabiduría
Popular de que “Dios aprieta pero no ahoga”.
Y eso es lo que nos ha ocurrido con la
irrupción en primera línea de combate del compa Alberto Garzón.
Porque Alberto es un
líder (el pueblo lo aprecia, y lo dice, y lo admira) porque reúne las
condiciones de un líder.
No vamos a reflejar
sus cualidades por no hacerle la pelota, pero si tenemos la suerte de tener un
líder, que encima es el más apreciado por la Clase Obrera, nuestra obligación
es explotarlo al máximo y desgastarlo al mínimo, y si es posible nada.
Porque es de los
nuestros, y en la medida en que vale no tiene sentido despreciar su valía.
Así que antes de que
hable: Viva Alberto Garzón, Viva Izquierda Unida, Viva la Clase Obrera.
Paco
Molina. 1 de Octubre del 2016. Valladolid. XI Asamblea de Izquierda Unida de
Castilla y León.
Yo iba a presidir
dicha asamblea, y podría ocurrir que acudiera Alberto Garzón. Esto es lo que
tena preparado para presentarle. Por imponderables, nada ocurrió
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