ESCUELA DE
SABIDURÍA POPULAR
Paco
Molina. Dependencias del Cuartel Viriato mientras esperaba su conversión en
Campus, y para acelerar esta. 11 de Noviembre de 1994.
LA VERDAD
DE LA MENTIRA
Sobre
el horario
La obligación de acabar a las 9,30 (de la noche) nos
favorece porque: 1. Evita la clase larga. 2. Nos pudiera obligar a su vez a dar
una en dos. 3. Permite abrir la siguiente clase con las preguntas pendientes de
la 1ª (o sea, a un repaso y asentamiento de ideas). 4. A las 9,15, algún Maragato
de Astorga debe interrumpir para dar entrada al debate dinámico.
*Esta aceleración
del proceso no sólo no va a evitar que empecemos como siempre con un
recordatorio, sino que en ese recordatorio deben “elevarse” las dudas,
discrepancias o aportaciones que durante 15 días haya producido la cuestión
tratada en la cabecita (por suerte aquí no hay cabezotas) de cada uno o una.
Siguiendo con estos
meandros disquisitivos y antes de llegar al mar: Indicarle al Jefe de Estudios
que la lección que (dentro de la asignatura LO QUE NOS ENTIENDE) irá después de la que llamaremos
“POLÏTICA”, se titulará “EJERCICIOS ESPIRITUALES”.
Consistirá en
frases, dichos o refranes, así como alguna que otra paradoja: que nos hagan
pensar.
Sirva de ejemplo,
algo que viene a cuento para que veamos que limitar la clase en el tiempo nos
viene bien, porque sabido es que para hablar sólo hacen falta 3 cosas: i).-
tener algo que decir. ii).- decirlo. iii) Y callarse.
REPASEMOS el cogollo
de las lecciones ya explicadas:
LOS CELOS: Son un
mal, individual y social que hay que combatir socialmente y educando.
EL AMOR, supone que
al otro le puedes decir: Te quiero. Te necesito. Te deseo. Surgen así distintas
clases de amor, según la intensidad de cada uno de esos 3 sentimientos. Y
además sabemos que hay otros quereres, que no son amor, según aquellos de los 3
sentimientos que se den en la relación.
EL PAVO REAL: El
animal abre la cola para ligar y obtener placer con el apareamiento. El hombre
la abre continuamente dejando pasar el momento del placer.
Pavo Real Turulato es
el hombre que, si tiene pareja no tiene sentido que siga abriendo la cola; y si
vive sólo, menos sentido tiene que la abra una y otra vez sin aprovechar los
efectos de cada apertura.
FUNDAMENTO
VITALISTA: Los animales y las personas se rigen por la brújula del
PLACER/DISPLACER
Otra cosa: Ya que la
lección de hoy es dura (advertimos que puede herir la sensibilidad de algún
espectador/a).
Y como tenemos
indicios de que no se nos está juzgando con acierto en ciertas aseveraciones,
recordemos la teoría de la “fórmula de procreación para que perviva la
especie”.
Imaginad unos
Árboles Machos y otro Hembras. Pues bien, el árbol macho está en condiciones
(bilógicamente) de depositar su simiente en cualquier árbol hembra, y el árbol
hembra está en condiciones de recibir la simiente de cualquier árbol macho.
En lenguaje humano
eso explica: 1.-Que el hombre sea más casquivano, más propenso a picotear aquí
y allá. 2.- Que la mujer pueda enamorarse perdidamente de cualquiera.
¿Por qué de
cualquiera? Para facilitar la procreación, porque si fuera una selectiva arrogante,
no estaría en disposición de “ser preñada” .
Respecto a si es
exagerado o no eso de que pueda “gustarle cualquiera”, mantenemos que si, y
basta para ello recordar:
Que puestas a ser
poco exigentes, las mujeres acaban conformándose o pidiendo una sólo cualidad;
que el macho que la empareje sea TIERNO.
¿Por qué
perdidamente? Porque como lo único que ha de autogarantizarse es la
probabilidad de ser embarazada, le basta UNO…por tanto puede entusiasmarse
biológicamente con ese solo.
Por tanto, cuando
contamos esta teoría sobre el comportamiento humano, en lo que respecta a los
emparejamientos (teoría que no es nuestra) no estamos siendo machistas: tan
bien y tan mal (en el sentido cultural) quedan el macho como la hembra.
Desde luego la
teoría “justifica” la promiscuidad del varón, y “relativiza” la fidelidad de la
mujer, pero en la medida en que la explica biológicamente, en cuanto que
animales que somos, lo que hace es ayudar a entendernos y perdonarnos más, pues
si no hay comprensión y perdón, habrá ira y violencia.
Mi pequeña teoría de
por qué la mujer es algo más monógama que el hombre, se basa en que: 1.- Siente
más placer en los encuentros sexuales. 2 Existen los reflejos condicionados.
3.- Dichos reflejos la atan más al de turno…sobre todo si le ha tocado un buen
turno.
Y vamos ya con LA VERDAD DE LA MENTIRA.
Tema que hemos
advertido puede herir la sensibilidad del espectador, por lo cual, quien sea
sensible de alma debe aprovechar el momento para ausentarse.
((Veo que
ninguna/ninguno sois sensibles ¡que decepción!))
La razón por la que
nos atrevemos a decir que puede quedar herida la sensibilidad del espectador,
está en que la moraleja de esta lección, la enseñanza práctica, la utilidad se
cifra en la tesis:
“Mentir es algo feo pero imprescindible: Luego hay
que aprender a mentir, para hacerlo bien, mientras nos resulte soportable esta
sociedad”.
Programa: 1.-¿Qué
es mentir?. 2.-¿Por qué se miente?. 3.-El malo de la película. 4. El débil y la
mentira. 5.-La mujer: parece mentira. 6.- Clases de mentiras. 7.- La verdad es
siempre revolucionaria. 8.- Función terapéutica de la mentira. 9.- Para qué
sirve la verdad.
1.-
¿Qué es mentir?
Ocultar la verdad
por el método que sea. Tapar la realidad con datos falsos.
La mentira es algo
feo pero se hace por necesidad, como las ventosidades.
2.-¿Por
qué se miente?
Porque necesitamos
dar una buena imagen.
Porque hay códigos
de conducta (sociales, religiosos, familiares, privados) que deseamos respetar
(para ser apreciados) y al no hacerlo nos sentimos mal.
La cadena de la
mentira podría ser: i) Deseo de ser apreciados. ii) Aceptación de códigos. iii)
No cumplimiento ocasional de esos códigos. iv) Ocultación de la falta para
mantener el aprecio. v) Para mantener las ventajas que se tienen cuando se
cumple el código es por lo que se miente. vi) Todo esto hace necesaria la
mentira. vii) mentimos una y otra vez. viii) surge el arte de la mentira.
El teorema
contra-recíproco (que siempre es cierto) sería: No habría que mentir si no se nos juzgara respecto a códigos de
conducta.
3.-
El malo de la película.
Dentro de los
códigos que nos obligan a mentir, el más feroz es el que excomulga, denigra y
sataniza a la persona mentirosa.
No hay peor ser que la
persona mentirosa (es el mensaje) porque no te puedes nunca fiar de ella (estás
vendido, se nos dice).
La persona que
miente es canalla, falsa, digna de desconfianza y deberíamos desterrarla de
nuestra proximidad.
Sin embargo: Vamos a
demostrar (y por tanto a sostener) la tesis de que el malo, el pernicioso para
la convivencia es “quien obliga a mentir”
Sea UNO o sean
TODOS, los culpables de que haya mentiras son los intolerantes.
Hagamos un
experimento, de observación, hipotética:
Repasemos la vida de
un bebé:
No parece que tenga
razones para mentir: No sufre ningún código de conducta. Además no sabemos
nada de él (no nos acordamos y no nos
cuentan nada): Aunque puede que alguna vez lloren en falso para recibir una
ración extra de teta y pezón.
Empieza a crecer, y
ya comienza a recibir códigos: Esto no se hace. Esto no se toca. Esto no se
dice.
Como resulta que los
códigos de conducta son frutos de la civilización (o sea, de nuestro rapto o
secuestro del reino animal al que pertenecemos) suelen ir contra nuestros
instintos básicos o juguetones, y acabamos: Haciendo lo que no se hace, tocando
lo que no se toca o diciendo lo que no se dice.
Mecánica de la
salvación por la mentira: Pecado supone castigo. Hay que buscar una solución.
Esa es mentir (yo no he sido, yo no lo hice), soy tan bueno como tú quieres que
sea, sigue por tanto tratándome bien.
La mentira busca que
nos traten bien, que nos sigan tratando bien.
Volvamos al
experimento con el bebé.
¿Al aumentar la edad
aumentan las necesidades de mentir?
Indudablemente:
Aumentan los códigos de conducta, y por tanto aumentan los círculos donde
necesitas aprecio, luego aumentan las situaciones en que, o mientes o te la
cargas.
Círculos
concéntricos con códigos de conducta a cumplir: Pareja +familia +pandilla
+sociedad +patria chica +patria grande + humanidad. Más los círculos
transversales llamados religión y estado.
En la adolescencia
se multiplican las necesidades de mentir, porque se multiplicaron los que te
exigen ir contra corriente.
Y de mayor, no digamos,
el niño ya crecido, le tiene que mentir hasta a Hacienda, lo que ya es el
colmo.
De todas formas.
Para hacer todo más evidente estudiemos a “la pareja”.
¿Quién es el
malo? ¿Quién miente o quién, por su
intolerancia, invita/incita a la mentira?
Eliminemos, por
escabrosa, la prohibición de que te pongan los cuernos (aunque volveremos sobre
ella).
Tomemos a un
sujeto/dictador (en el sentido de que “dicta” las normas) que se enfada si, él
/ella:
Llega después de las
10, o fuma, o toma cañas a deshoras, o coquetea, o etc.etc.
Por fuerza, al haber
tantas normas, algunas quiebras. Al quebrarla la 1ª vez, confiesas. Pero
descubres que la confesión generó más bronca, y aprendes la lección.
¿Qué lección
aprendes? No la que cree el dictador, de: ya no volveré a caer porque no me
compensa.
La lección que
aprendes es:
Confesión es decir
la verdad. La verdad indica que no acatas las normas. Eso supone el infierno
del malestar. Incluso pierdes autoestima (culpabilización). Pero si reincides
es peor (auto inculpación). Aumenta el malestar. Por lo que buscas una salida a
esa angustia. Y la salida es la mentira.
¿Pero quien creó al
mentiroso/a? El dictador, el intolerante.
Luego el malo de la
película de las mentiras es quien las promueve con su intransigencia.
Si de verdad todos
amáramos la verdad como decimos, seríamos tolerantes y conoceríamos todas las
verdades, nos duelan o no.
Pero ¡¡¡quiá!!! La
verdad es algo insoportable por culpa de esta inadecuada sociedad.
4.-
EL DÉBIL Y LA MENTIRA.
Como la mentira tiene
como función una autodefensa que impida que nos arrojen del Paraíso, resulta
obvio que no todos/as estamos en la misma situación ante el número de
obligaciones de mentir.
El fuerte, por su
propia fuerza, por su propio poder, por ser incluso el que impone los códigos
de conducta, puede “perdonarse” (hacerse perdonar), y no necesita por tanto
mentir tanto.
Sin embargo el
débil, temeroso por serlo (¿qué será por mi fuera del paraíso?) Ha de recurrir
más a la mentira.
Así tenemos que por
fuerza:
*Tiene que mentir
más el obrero que el patrón (Por ejemplo por llegar tarde al trabajo).
*Tiene que mentir
más el joven que el adulto/independiente.
*Miente más la mujer
que el hombre.
5.- LA MUJER:PARECE MENTIRA.
Por ser mucho más
numerosos los códigos de conducta a los que se debe someter una mujer, y por
ser mucho más severos, la mujer (en posición de debilidad social además) ha
hecho de la mentira “un arma cargada de razones”.
Se puede decir, con
poco riesgo al error, que la mujer miente más (y por tanto mejor ya que la
experiencia es un grado) que el hombre.
Y no porque sea mala
o peor: Simplemente porque TODO LO TIENE PROHIBIDO. Porque respecto al hombre
es el ser débil: el esclavo.
Ella no dicta los
códigos de su conducta.
O se inmola en la
hoguera de la bronca diaria o miente.
La mujer ha hecho de
la mentira un arte cromosómico. De tal calibre que merecería un estudio
riguroso por lo apasionante.
Yo, lo único que he
observado es que un dato propio de la mentira femenina radica en que miente en
torno a la verdad.
6.-
Clases de mentiras
*Según el sujeto
EXIGENTE (puesto que es
quien obliga a que se mienta):
-Autoengaño (el
exigente es uno mismo).
-Mentira de infidelidad
(relativo a la pareja).
-Mentira de sociedad
(por destacar. Lo exige la sociedad).
-Mentira social:
Económica, política, religiosa, estado, etc.
*Clases de
mentira según la intencionalidad:
-Mentira piadosa
hacia el exterior: enfermedades.
-Mentira piadosa
hacía el interior: Las demás
*Según el tamaño: Pequeñas. Grandes.
Estadísticas (viendo Supermán I y III es como si hubieras visto Supermán II)
7.-La
verdad es siempre revolucionaria.
La verdad dicha con
intención es una roca catapultada contra un escaparate.
La sociedad actual, basada
en el pilar de la Hipocresía: Tiene su principal enemigo en la verdad, que todo
lo destruye (incluso la verdad científica; cada verdad rompe ilusiones)´
Si queremos ser
sociables debemos mentir.
8.-
Función terapéutica de la mentira.
La mentira es como
el aceite en el motor del coche. Sin ella el tipo de vida conocido saltaría en
pedazos.
Por ello resultan
antipáticos los cínicos.
O cambiamos de
sociedad (sus valores) o hay que tener valor para decir la verdad.
Acostumbrémonos a la
mentira y pensemos que nos mienten por nuestro bien. ¡Pobre de aquel a quien no
le mientan!
9.-Para
qué sirve la verdad.
La verdad sirve para
que el poderoso domine al débil.
Por eso se preconiza
la sinceridad como virtud, para que el débil (mujer, niño u hombre, esclavo o
trabajador, etc.) CONFIESE.
Eso es decir la
verdad ¡¡confesar!!, y a partir de ahí tenerle controlado: con la vigilancia o
con el castigo.
Por lo demás, la
verdad, no sirve para nada, salvo para sufrir, puesto que no nos han educado
para afrontar las verdades de la vida.
¿¿Puede tener
utilidad (si no es para dominar) el saber la verdad??
En absoluto. Cuando conocemos
una verdad automáticamente notamos que nos molesta. Molestia que origina una
reacción airada para que el sujeto paciente “aprenda la lección”.
¡¡Hay que mentir!!
Así que compas,
aprended a mentir o cambiar la sociedad....porque lo que habéis oído es la verdad
de la mentira.
Por cierto: Esto que
se os ha dicho ¿creéis que es verdad o mentira?
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