LETRA     PEQUEÑA

Billy Gates, el dios de la informática, declaró que no le parecía adecuado votar por internet porque es un sistema fácil de manipular. La pregunta se la hicieron porque era cuando el actual Gobierno dudaba si convocar un referendum sobre la Constitución Europea, y ante el miedo a la poca participación, barajaba la idea de utilizar este método.

            Ya en las pasadas elecciones se hizo un ensayo en Toro, y ahora parece que el conejillo de indias va a ser enmaromado en Benavente. Naturalmente sabemos que el resultado no es válido, pero por si acaso habría que meter un pregunta de contraste, como que “si quieren un hospital”, no vaya a ser que gracias a la ciencia no sea así.

            Como creo que van a repartir una bebida “isobobónica” por la cual si la bebes te da un subidón democrático y vas a votar quieras que no, me voy a atrever a compartir dos cosillas. El borrador de constitución que proponen es como el contrato de compra de un piso. Nunca debes dar el primer dinero que te pidan, pues lo pagaras caro. Pero es que además, en todo contrato, lo más importante es la letra pequeña y esa no nos la está leyendo nadie. Por eso, sin otro ánimo que ayudar, se la cuento. Dice, entre otras lindezas:

 “No habrá fronteras interiores y sí un mercado en el que la competencia sea libre y no esté falseada. El desarrollo se basará en la estabilidad de los precios, en una economía social de mercado altamente competitiva. (Es decir no hay otra madre del cordero que la competitividad, y en esa guerra pacifica ya se sabe, los generales son los capitostes y los soldaditos los que “mueren “ en combate, por paro, o bajadas de salario o con despidos baratos, son los trabajadores)

“Habrá libre circulación de personas, servicios, mercancías y capitales, y libertad de establecimiento”. (Entiéndase, las empresas podrán instalarse donde más barata esté la mano de obra, o sea irse las buenas fuera, ¡y venir las malas! a donde más baratos se vendan los pueblos y traguen centrales térmicas o cementerios nucleares)

“Funciones de cada Estado: integridad territorial, mantener el orden público y salvaguardar la seguridad nacional. (Con cumplir eso, misión cumplida, adiós protección social pública)

“Competencia exclusiva de la UE: Normas sobre la competencia; política monetaria y política comercial común. Las políticas de empleo serán coordinadas según las orientaciones de lo dicho. El Banco Europeo dirigirá la política monetaria, con el objetivo principal de mantener la estabilidad de precios” (Más claro agua, pues la política monetaria significa no a la inflación, es decir si a la contención de salarios, y  el no aumento del gasto, y si eso exige paro, mala suerte)

            “Política de Defensa a tope y nada de acciones que la menoscaben. Estados solidarios entre sí en caso de guerra. Mejorar progresivamente las capacidades militares. Se puede actuar fuera, entre otras cosas para prevenir conflictos” (Adiós al pacifismo; el ritmo de inversión en armas será imparable y viva la guerra preventiva)

.           “Los estados se esforzarán por la libertad de los servicios..Economía de mercado abierta y de libre competencia”.(Se acabó el vivir de la teta Estado, y eso aquí en Zamora donde “quien esté libre de subvenciones que tire la primera piedra”, va a ser demoledor)

“Fomentar la producción agrícola incrementando el progreso técnico. Sucesivas adaptaciones del mundo rural” (Osease, en el campo el último que cierre la puerta, y de ecología ni tu tía)

Compremos el piso, pero digamos no al primer precio que nos piden, que de lo contrario lo pagaremos caro, como muy bien dice la letra pequeña.

      FRANCISCO  MOLINA. Año 2005. La Opinión de Zamora