sábado, 12 de diciembre de 2015

Los BOTAFUMEIROS DE PRENSA

Los BOTAFUMEIROS DE PRENSA

También se llaman “gabinetes de prensa” e incluso es más fácil que usted los conozca por este nombre que por el del título.

Los gabinetes de prensa suelen ser departamentos, compuestos por una o más personas, creados por las instituciones públicas o privadas.

En el caso de las instituciones más conocidas (ayuntamientos, diputaciones, autonomías), los gabinetes de prensa sirven pura y realmente (sólo) para el autobombo del equipo de gobierno correspondiente.

Por tanto, son una forma de tirar el dinero.

Si el país esta tan pachuchito que hay que enviar al paro a mineros, agricultores y “reglero-currantes”, varios, no se entiende por qué razón no se prescinde de los gabinetes citados.

¿Para qué sirven? Para relacionarse con los medios de comunicación y para difundir la información que genere la institución (se dice).

Ahora Bien. Teniendo en cuenta que lo que pasa dentro del quehacer municipal, diputacional y autonomical es noticia, o fuente de ella, para cualquier periodista, a santo de que “pedirle que venga al que va a venir sin pedírselo”; con un mero contacto de secretario basta.

Y en cuanto a la “información de lo que acontece en la casa pública (de todos)”, para qué hablar:
los gabinetes de prensa se ponen a las Ordenes de quien contrata y, obedientes, luego cuentan solo los logros del contratante, contando lo magnífico que ha hecho el magnífico, a haciendo que aparezca siete veces “la esperada decisión sobre tal tema”.

Un juego al que se invita al lector es este:

Comprueben cómo cada presunta-obra-realizada “se vende” o es noticia (de gabinete de prensa) el día que la piensa el grupo mayoritario, el día que la dicen, el día que la autoriza el ministerio, el día que se propone en el equipo de gobierno, el día que se propone en comisión, el día del pleno, el día del pleno, el día de la primera piedra, el día que se va a acabar pronto, el de que por fin se acabó, el de la inauguración, etc.

Los gabinetes de prensa están al servicio del partido que manda para hacerle propaganda; lo negativo está en que ese trabajo lo paga cada ciudadano de su bolsillo.

Si se construye una carretera, eso es noticia por si, y la darán los periódicos y las emisoras, y no hace falta tener un periodista a sueldo del respetable para decir lo mismo o para anunciar que se ha hecho lo que había que hacer.

Se imaginan que el Insalud también tuviera su gabinete de prensa para contarnos:

Hoy el doctor Frankenstein ha operado tres amígdalas y un colon, a continuación, en el vino de honor correspondiente, miembros de la Asociación de Familiares Independientes le han mostrado su agradecimiento.

O que cada centro de enseñanza igual: El jueves, 3 de febrero, coma es tradicional por estas fechas, una profesora, por determinar, va a explicar el teorema de Pitágoras, siendo novedad importante la proyección de diapositivas de los nuevos triángulos-rectángulos-logse.

El que quiera hacerse propaganda que se la pague.


FRANCISCO MOLINA. El Correo de Zamora.Imperecedero

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